Ajuntament de Vila-real

jueves, 10 de noviembre de 2016

El Ayuntamiento de Vila-real está trabajando en un borrador que, además de ofrecer las consecuencias y las cifras exactas que se derivan de la gestión urbanística del PP en sus últimos años de gobierno local, servirá para implementar un nuevo instrumento que minimizará el riesgo de las reservas de aprovechamiento urbanístico concedidas en su día, "evitando la ruina a la ciudad". Así lo han anunciado el alcalde, José Benlloch, y el concejal de Territorio, Emilio M. Obiol, quienes han anunciado también la convocatoria de una jornada informativa y de debate sobre esta solución urbanística el próximo martes 22 de noviembre, en la Fundación Caja Rural.

"Queremos que todos los vecinos estén informados y conozcan el problema y todo lo que supone para las arcas municipales; por eso, en esta jornada abierta a todos se expondrán las principales cuestiones que nos afectan como ciudadanos y los expertos explicarán cada detalle tanto del problema como de la solución en la que trabajamos", señala Obiol. "El documento se someterá a exposición y periodo de alegaciones una vez aprobado, pero hemos querido dar un paso más y, con la máxima transparencia, explicar a todos los interesados en esta jornada en qué estamos trabajando para taponar el riesgo y la sangría que pueden suponer los aprovechamientos", agrega Benlloch.

En este sentido, el alcalde recuerda que "hasta el momento, hemos intentado controlar la situación pagando, y ya vamos por los 16 millones de euros". Sin embargo, el borrador del estudio realizado determina un riesgo global de 231 millones de euros si todos los propietarios a los que se les concedieron reservas de aprovechamiento urbanístico a cambio de sus terrenos reclamaran su derecho a cobrar por sus tierras. Esta cifra "espectacular e inaudita", según Obiol, corresponde a los 698.000 metros cuadrados de techo concedidos en su día por el Partido Popular "a pesar de que sabían que era ficticio y que no se podían materializar", puntualiza el alcalde, para quien el recurso a las reservas de aprovechamiento por parte del anterior gobierno municipal era un método "perverso e ilegal; una gran mentira que ha derivado en empastres como la apertura de la avenida de Francia, el solar la Escuela Oficial de Idiomas o el jardín de Botànic Calduch".

La solución en la que se está trabajando es posible ahora gracias a los instrumentos que ofrece la nueva Ley valenciana de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje (LOTUP) y pasa por aprovechar bolsas de suelo urbano donde en su día hubo industrias para materializar los aprovechamientos. Esta medida supone un trabajo "escrupuloso y garantista con los derechos de los propietarios, que un buen día vieron ocupados sus terrenos sin recibir a cambio más que humo y promesas totalmente descabelladas; ahora verán materializado su derecho, sin quitar ni un centímetro y en suelo urbano actual". 

Para plasmar estos aprovechamientos se barajan siete zonas: avenida de Grecia, en el área del Botànic Calduch, en el entorno de Maderas Clemente (junto a la carretera de Onda), en el solar que anteriormente ocupaba la empresa Azuvi (en el sur de la ciudad), así como en las manzanas 532 y 533 del PGOU, o en zonas de Espai Vila-real y la Ciudad del Transporte. "Se trata de hacer de esta una ciudad más viable y, además de taponar la hemorragia, como hemos hecho hasta ahora, evitando que la gestión irresponsable del PP rompa de nuevo la caja del Ayuntamiento", indica Obiol. Tras la jornada de debate del día 22, la intención del equipo de gobierno es aprobar y comenzar a trabajar con este instrumento este mismo año o principios del que viene.

Galería multimedia

Imágenes