Ajuntament de Vila-real

viernes, 17 de marzo de 2017

El Ayuntamiento de Vila-real pedirá formalmente al Gobierno central la revisión catastral, con el objetivo de ajustar los valores a la realidad actual del mercado, por debajo de los valores de la última ponencia, que data de 2006. El alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha anunciado la decisión, que contó con la unanimidad de todos los grupos municipales en la Junta de Portavoces convocada esta misma semana. 

"La ponencia vigente, que se revisó durante el mandato del PP, es brutal y afecta de manera directa a los impuestos que han pagado los vecinos durante años", explica Benlloch. A pesar de que la crisis inmobiliaria ha rebajado los precios de terrenos y viviendas, los valores catastrales fijados en 2006 se mantienen en la actualidad, muy superiores a los del mercado real. "Por este motivo, vamos a solicitar un estudio completo de todo el mercado inmobiliario para comparar", apunta el alcalde.

Con este objetivo, Benlloch y la concejala de Hacienda, Sabina Escrig, mantuvieron recientemente una reunión con la Dirección General del Catastro. En el encuentro, los responsables del Catastro admitieron que hay viviendas y terrenos que podrían estar un 20% por encima del precio de mercado. Sin embargo, explica el alcalde, "propusieron evitar la revisión de la ponencia general, a cambio de rebajar un 10% los valores el próximo año y otro 10% más en 2019". Ni el primer edil ni los portavoces de los grupos municipales están de acuerdo con esta propuesta, por lo que se ha decidido solicitar una nueva ponencia. 

"Han pasado 10 años desde la última vez que se revisó y sabemos que se puede conseguir más de lo que se nos propone, por lo que nuestra intención es que se actualice de manera definitiva", asevera Benlloch. No obstante, aclara que para que esta rebaja en los valores catastrales se produzca debe pasar tiempo. "El Ministerio necesita una partida económica específica para hacer un estudio previo financiada al 50% por el Gobierno, y el Ayuntamiento debería reforzar la estructura municipal para que los vecinos puedan venir a asesorarse, lo que podría suponer la aportación de alrededor de unos 120.000 euros", explica. De esta manera, la revisión podría ser efectiva a mediados o finales del 2019, según las previsiones municipales. 

En cualquier caso, Benlloch ha querido aclarar que la revisión de valores catastrales se verá reflejada en los impuestos derivados de la compra, venta o herencia de bienes, pero no en la contribución. "El IBI se quedará como está estipulado a partir de este año, para no incurrir en ningún error que nos lleve a incumplir la ley de estabilidad presupuestaria de Rajoy", recuerda el alcalde. "Mientras el PP aprovechó cada año de su legislatura para subir la contribución un 20%, nosotros la congelamos y rebajamos, hasta que en 2016, y fruto de la herencia recibida, nos vimos obligados a tomar una decisión para hacer viable el modelo de ciudad y hacer frente a las sentencias del PP y gastos sobrevenidos como el incremento del coste de las basuras. No podemos ser tan irresponsables como para jugar con la estabilidad de la ciudad", puntualiza Benlloch.

"A pesar de los empastres que encontramos al llegar al gobierno local, hemos podido sanear las cuentas, reducir la deuda, abrir nuevos espacios e instalaciones para los vecinos, reducir el paro del 27 al 17% y rebajar cinco de los siete impuestos que se pagan en la ciudad (plusvalías, ICIO, IAE, el impuesto de vehículos y el de las terrazas y mercados), mientras que otros dos se han congelado: el IBI, que quedará al nivel del 2011 y las tasas de deporte", concluye.