Ajuntament de Vila-real

viernes, 21 de septiembre de 2018

El Ayuntamiento de Vila-real creará una comisión de trabajo que elaborará una normativa propia para las peñas con el mayor consenso posible, con el objetivo de compatibilizar su actividad con el descanso de los vecinos, especialmente en fiestas, pero también durante el resto del año. "En los últimos tiempos están creciendo las quejas vecinales por las molestias que generan algunas peñas; desde el Ayuntamiento estamos preocupados y queremos dar solución a este problema", argumenta el alcalde, José Benlloch. 

"Las peñas son una de las instituciones con las que más identificados nos sentimos, porque son el verdadero motor de la fiesta y, además de un lugar de reunión y diálogo, son espacios donde también se realizan actividades y se demuestra la solidaridad", afirma. No obstante, Benlloch lamenta que en algunas zonas con concentración de estos locales "se están produciendo problemas de convivencia". "Estos problemas se tienen que solucionar; la cuestión no está en prohibir, no queremos que las peñas desaparezcan, pero entre todos tenemos que dar una respuesta para que todo el mundo pueda sentirse bien en nuestra ciudad", puntualiza.

El alcalde se ha mostrado preocupado debido a la llegada de quejas de vecinos de la calle Salvador, Santa Anna, San Joaquín o Tremedal, entre otras. "Está claro que durante las fiestas nos permitimos ciertas licencias y la gente es consciente de ello, pero no puede ser que durante todo el año haya problemas de ruido, insalubridad o inseguridad; tiene que haber unos límites", señala el primer edil, quien recuerda que en la actualidad la actividad de las peñas se regula por la Ordenanza de Convivencia Ciudadana. Además, existen normas básicas para comprobar el estado de los casales y un control con número de registro para tener constancia de su existencia. 

Sin embargo, lamenta Benlloch, "la normativa actual no nos sirve". "Hay que trabajar todos juntos y llegar a acuerdos para conseguir un equilibrio entre la diversión y el descanso", agrega. Con este objetivo, se creará una comisión de trabajo, encabezada por el alcalde y, en su defecto, por la concejala coordinadora general de Alcaldía, Silvia Gómez, en la que estén representadas las áreas municipales de Seguridad, Fiestas y Participación Ciudadana, la Junta de Fiestas y la Comisión de Peñas, así como todos los partidos políticos con representación municipal. 

"Tenemos ya sobre la mesa algunos proyectos y ejemplos de otros municipios para trabajar y crear nuestra propia normativa, pero siempre con el mayor consenso posible, sometiéndola a debate y contando con las ideas de todos", explica Benlloch. Para ello, el proyecto final deberá pasar también por el Consejo de Participación Ciudadana y por el Pleno. El objetivo es que en un máximo de tres meses ya se tengan todas las conclusiones y que el documento pueda aprobarse antes del mes de mayo. 

"Necesitamos una normativa más estricta, con una regulación de horarios más ajustada y, si es preciso, con el endurecimiento de sanciones. Una ordenanza que permita tomar medidas con aquellos que no respetan la convivencia, porque, al final, pagan justos por pecadores", puntualiza el alcalde. "Esperamos una mejor convivencia", concluye.