Ajuntament de Vila-real

lunes, 9 de mayo de 2016

Durante los meses de primavera y parte del verano se establece un período de veda temporal de pesca en el tramo bajo del río Mijares con el fin de no causar molestias a las aves mientras llevan a cabo la reproducción. El Consorcio del Paisaje Protegido de la Desembocadura quiere recordar esta medida eventual entre los pescadores de agua dulce que se desplazan por el tramo protegido, desde el puente de la carretera CV-18 hasta la desembocadura.

El tramo final del río Mijares, entre las poblaciones de Vila-real, Burriana y Almassora, atesora una relevante importancia ecológica debido a varios factores como por ejemplo la formación de lagunas poco profundas ricas en vegetación acuática y subacuática y la presencia, más o menos constante, de agua. Estas características permiten la llegada y la continuidad de decenas de aves como anátidas, garzas, gaviotas, limícolas y pequeños pájaros habitantes de lagunas y zonas húmedas. A partir de la primavera y hasta bien entrado el verano, muchas de estas aves aprovechan la tranquilidad del paraje para reproducirse. La presencia de pescadores continentales que acceden a las pequeñas balsas y lagunas que se forman en la desembocadura para pescar peces de agua dulce como carpas, barbos y otras especies puede provocar molestias importantes entre las aves nidificantes. Este hecho, en muchas ocasiones, provoca el abandono de muchos nidos con huevos y polluelos por parte de sus progenitores. Esta medida preventiva que principalmente afecta a los pescadores continentales también se hace extensible a los excursionistas que visitan el paraje. El Consorcio del Mijares quiere recordar que es muy importante no transitar por los lugares de cría de estas especies de aves con el fin de no asustar a la avifauna y provocar abandonos entre las aves que anidan. 

La desembocadura del Mijares es uno de los parajes protegidos más importantes de la provincia de Castellón. El tramo final del río, entre las poblaciones de Vila-real, Almassora y Burriana, alberga una población nidificante de aves muy importante protagonizada por diversas especies como son el calamón (Porphyrio porphyrio), la cigüeñuela (Himantopus himantopus), el chorlitejo patinegro (Charadrius alexandrinus), el martinete común (Ixobrychus minutus), el chorlitejo chico (Charadrius dubius) o el carricerín real (Acrocephalus melanopogon), entre otros.

El Paisaje Protegido de la Desembocadura del Mijares atesora además otras figuras de protección europeas como son Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y Lugar de Interés Comunitario (LIC).