Ajuntament de Vila-real

sábado, 29 de abril de 2017

El Consorcio de la desembocadura del Mijares ha comenzado los trabajos de desbroce, limpieza y recuperación del histórico azud dels Corrents, ubicado en el término de Vila-real, en el margen derecho del río, justo debajo del puente de la antigua carretera nacional 340. Esta construcción hidráulica del siglo XVII estaba formada por un antiguo muro de piedra y una acequia que servía para contener, elevar, desviar y aprovechar las aguas del río Mijares para la agricultura. Su desuso histórico y abandono posterior posibilitó que el lugar fuera invadido completamente por la vegetación ribereña hasta el extremo de que toda la primitiva construcción desapareciera de la vista.

La brigada de mantenimiento del Consorcio del Río Mijares ha estado trabajando durante dos días por los alrededores de la construcción. "Cuando accedimos a la zona del camino del agua, el azud estaba totalmente cubierto por zarzas y otra vegetación que mantenían el lugar completamente inaccesible. Iniciamos un desbroce selectivo, porque en la zona además de zarzas y cañas invasoras hay especies forestales autóctonas que hay que respetar", señala Samuel Basevi, operario de la brigada de mantenimiento del Consorcio.

El pasado 21 de abril el Ayuntamiento de Vila-real, a través de la Concejalía de Territorio, presentó un proyecto para recuperar este elemento arquitectónico hidráulico del Mijares de gran importancia histórica. Para el concejal de Turismo, Emilio M. Obiol, els Corrents es un elemento muy significativo del patrimonio hidráulico vinculado al Mijares y al aprovechamiento histórico de sus aguas, una construcción desconocida pero con una importancia y un valor etnológico que es necesario recuperar.

La primera fase del plan de actuación está a punto de culminar. "La previsión que tenemos es que el jueves que viene la zona estará limpia para que puedan acceder los equipos de investigación que tienen que hacer las pruebas y las medidas oportunas", concluye Basevi.

Durante la primera inspección de la zona se encontraron vestigios formados por una acequia cubierta construida por mampostería, dos puertas con arco de ladrillo y otros soportes constituidos por piedra. Dentro de unos meses, cuando la construcción esté restaurada totalmente, formará parte del patrimonio hidráulico de la ruta verde del Mijares junto con otras construcciones como canales, molinos, azudes y acequias.

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