Ajuntament de Vila-real

miércoles, 29 de noviembre de 2017

El antiguo albergue de Cáritas, ubicado en el número 56 de la Senda Pescadors, y aquejado de graves problemas de aluminosis, ya ha sido derribado. La actuación se produce después de que la Concejalía de Territorio de Vila-real gestionara el expediente de disciplina urbanística a la Fundación Bancaja, propietaria de la nave industrial, con el objetivo de garantizar la seguridad del entorno, así como de trabajadores y usuarios, ante una situación de "peligrosidad y ruina".

El concejal del área, Emilio M. Obiol, ha explicado que la entidad, tras recibir las instrucciones pertinentes, ha procedido al derribo de las instalaciones, con un total de 4.376 metros cuadrados. Las instalaciones, señala, presentaban "graves problemas estructurales, debido a la aluminosis". "Con esta actuación se responde y se da cumplimiento a la disciplina urbanística del Ayuntamiento y, sobre todo, se garantiza la seguridad a todos los niveles", indica. Obiol recuerda que la nave, además, contaba con 2.465 metros cuadrados de placas onduladas de fibrocemento con amianto, de cuya retirada también se ha hecho cargo la Fundación, siguiendo la directiva de gestión y eliminación de este tipo de residuos.

El coste de la intervención asciende a unos 26.000 euros, abonados por la fundación propietaria. "El Ayuntamiento ha intervenido, al igual que ha hecho en muchos otros casos similares, para abordar y garantizar el saneamiento de viejas naves industriales y edificios en estado de ruina, como ya ocurrió en el pasado con las fábricas Fritta y Azuvi, junto a otros almacenes en la misma zona de influencia, así como en la carretera de Onda", agrega.

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