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sábado, 14 de julio de 2018
La Policía Local ha concluido con 12 denuncias su campaña especial para evitar las deposiciones de los animales de compañía en la vía pública, que comenzó el 29 de mayo y finalizó el 10 de julio.
La iniciativa se ha ejecutado en diferentes turnos todos los días de la semana y los agentes, identificados con el uniforme reglamentario y, en ocasiones, en coches camuflados para sorprender a los propietarios de mascotas que se comportan de manera poco cívica.
En total se ha controlado a 126 personas y todas ellas iban equipadas con la correspondiente bolsa para la recogida de las heces. Sin embargo, las diferentes patrullas realizadas han permitido detectar a ocho dueños de canes que no recogieron los excrementos de sus mascotas tras realizar sus necesidades, por lo que han sido multados.
Dos de las multas se han interpuesto en la zona de la av. Alemanya, una más en el Passeig de l'Estació, dos en el jardín de Jaume I, una en el parque de Botànic Calduch, una más en la calle Benicarló y otra en la calle Cardenal Tarancón. Además, los agentes han denunciado a tres personas por llevar a los animales a zonas ajardinadas. Una de ellas en la av. Alemanya, otra en el parque de la Mayorazga y otra en el parque de Sant Pasqual. En este último espacio público también se ha sancionado a una persona que llevaba a su perro sin cadena.
Las denuncias rondan los 60-120 euros, ya que la Ordenanza de limpieza viaria y recogida de sólidos recoge en su artículo 24 la obligatoriedad de los dueños de animales de impedir que hagan sus deposiciones en cualquier parte de la vía pública destinada al tránsito de los peatones.
La prohibición abarca desde las aceras hasta zonas verdes, pasando por los restantes elementos de la vía pública destinados al paso, estancia o juegos de los ciudadanos, todo ello por motivos de salubridad pública. Asimismo, tal y como se pone de manifiesto en la Ordenanza de Convivencia Ciudadana (artículo 41.4): "todas las personas responsables de los perros deberán ir provistos de, al menos, una bolsa de plástico, de las que se utilizan para la recogida de heces, debiendo acreditar que disponen de ella a requerimiento de la Policía Local".
Además de recordar la prohibición de que los animales hagan sus necesidades en calles, paseos, jardines, juegos infantiles y zonas de tránsito de peatones, el artículo 43.4 destaca que los propietarios o responsables de animales "deberán recoger los excrementos sólidos". La campaña ha tratado de concienciar a los vecinos sobre el problema de las heces de animales en la vía pública, ya que implica una imagen de la ciudad poco cívica.
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