Ajuntament de Vila-real

miércoles, 27 de septiembre de 2023

José Pla Pitarch, casado y con cuatro hijos, fue asesinado el 16 de agosto de 1939 en Vila-real, represaliado por el franquismo. Su cuerpo permaneció tres días con sus noches tendido en la calle. Hoy, 84 años después, su familia va a poder poner fin al calvario de localizar sus restos y darles sepultura. La concejala de Memoria Democrática, Sabina Escrig, acompañada del arqueólogo de Arqueoantro Miguel Mesquida, ha anunciado esta mañana la exhumación de los restos que guarda la fosa común del Cementerio Municipal; una primera fase de los trabajos que permitirán localizar e identificar los restos de Pla, a instancias de la familia. Su nieta, Encarna Pérez, explica por qué: "Sólo quiero poder coger sus restos y ponerlos junto a su mujer, que está esperándolo hace muchos años. Eso es lo único que pido. Es mi felicidad". Junto a Encarna, Luis, sobrino de Pla, y la portavoz de Compromís, Maria Fajardo, han participado en el anuncio de la exhumación.

"Hoy hacemos un acto por la memoria, la justicia, la dignidad y la reparación. Pero también por algo tan básico como es cumplir la ley. Hoy, quiero recordar especialmente la frase de Julia Conesa, una de las 13 Rosas: Que mi nombre no se borre en la historia. Porque no podemos olvidar a todas aquellas personas que fueron asesinadas por pensar diferente ni las que, todavía hoy, están en fosas comunes, en cunetas o en paradero desconocido. Bajo una tierra que tapa las vergüenzas de años de olvido por parte de las administraciones", señala la concejala.

"Por memoria, para recordar a las personas muertas, asesinadas y desaparecidas; por justicia, para los represaliados y sus familias; por dignidad, para poder darles una despedida y sepultura dignas; por reparación del sufrimiento de tantas y tantas familias que tienen derecho a elaborar un duelo y despedirse de sus seres queridos. Por todo eso, hoy damos un paso importantísimo con el inicio de la primera fase para la localización de los restos de José Pla", agrega Escrig. En esta línea, la concejala de Memoria Democrática ha querido agradecer de manera muy especial la paciencia de los familiares, que iniciaron el proceso administrativo hace casi cuatro años. "No se trata de venganza, como dicen algunos, sino simplemente de dignidad. Y no sólo para los republicanos y represaliados por el franquismo, ya que, probablemente, en la fosa del Cementerio Municipal encontraremos también soldados que fallecieron en la guerra de ambos bandos", puntualiza.

Para hacer posible esta primera fase, el Ayuntamiento ha formalizado un contrato de 16.900 euros (IVA incluido) con la asociación especializada Arqueoantro que, pasada la festividad de Todos los Santos y tras la investigación documental emprendida por la familia, iniciará los trabajos de campo. No será fácil. Explica Mesquida que la fosa de Vila-real es más bien una cripta donde fueron trasladados "a modo de osario" los restos de una fosa anterior. "Probablemente, vamos a encontrar tanto restos de fusilados como de soldados, republicanos y nacionales, e incluso puede que enterramientos ordinarios. Por eso, es necesaria esta primera fase para la exhumación e individualización de los restos, que remitiremos a nuestro laboratorio de Madrid. Esto nos permitirá saber cuántos cuerpos y represaliados guarda la cripta de Vila-real para poder valorar la segunda fase", explica Mesquida. 

En esta segunda fase, se procederá a la identificación de los restos mediante pruebas genéticas y estudios biológicos. Para ello, Escrig ha garantizado el compromiso del alcalde, José Benlloch, para que los trabajos de identificación puedan financiarse pese a que "todo indica que la Generalitat va a dejar de financiar estos trabajos", advierte Mesquida. "Para el alcalde y para todo el gobierno municipal, poder reparar, dar justicia, dignidad y memoria por José Pla Pitarch es una prioridad", concluye Escrig.

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